BAFWEEK#DIA 4

Con un público numeroso, en el que había estudiantes de diseño, amantes de la moda, fashion victims, bloggueros y muchas teens, finalizó BAFWeek, la gran semana de la moda argentina, que tuvo lugar en La Rural (con un show inaugural en el estacionamiento de Paseo Alcorta).

Fueron cinco días intensos donde se vieron las tendencias que vienen con todo para este invierno. El animal print, el estilo militar, los tejidos artesanales con guardas Bariloche, las pieles y las botas cortas fueron algunos de los ítems a tener en cuenta.

Con una pasarela muy sweety, con macetones repletos de rosas y globos, Como quieres que te quiera presentó su colección, en una sala desbordada de un público en su mayoría adolescente.
La firma, que apunta al público teen, abarca todas las tendencias del invierno. Hubo una línea country, con camisas a cuadros, chalecos de napa con corderito y boyfriends jeans. No faltó tampoco el estilo militar, con camisas de gabardina, pantalones cargo (tanto chupines como sueltos) y camperones con capucha. Todo, en verde seco y verde oliva.
Luego, vino la propuesta preppy, con faldas tableadas, jumpers, blazers de pana, sweaters de escote redondo, cardigans tejidos, capas de algodón espigado y vestidos de cuello babero. La estampa leopardo también dijo presente. Se la vio en chalecos, remeras, sacos tejidos, botinetas y botas de lluvia.
Para la noche, la propuesta es bien femenina: faldas de satén con apliques de moño o flores con mucho volumen, vestidos de encaje o con capas de voladitos superpuestos. Todo en marfil, rosa y blanco.

Femenina, práctica y ponible, la colección de Desiderata no defraudó a sus seguidoras. Con Déborah de Corral cantando en vivo, la propuesta abarcó una línea más urbana en la que se vieron parkas, chalecos de pelo largo, babuchas, jeans (tanto sueltos como chupines) en diferentes lavados y algunos con efecto salpicado. Además, apostó a la superposición de prendas (camisa + cardigan + chaqueta + chalina).
Más formales, los blazers -que se llevan con pantalones cigarrette- las faldas con vuelo, las capas de microfibra con capucha, los conjuntos de vestido y chaqueta muy corta haciendo juego, los enteritos de seda y los vestidos de estampas de flores cúbicas.

Siempre poniendo énfasis en la sastrería, Vicki Otero presentó una colección de inspiración folklórica en la realizó con éxito un gran despliegue de recursos. Las camisas con volados dispuestos en forma de cuadrado, las polleras de vuelo con cintura bien marcada, los tapados de lìneas rígidas y exageradamente realzadas, los dobleces en blusas formando grandes moños y las sobrefaldas a modo de delantal, se llevaron los aplausos.
La paleta, como suele ser su estilo, bien neutra: negro, gris, visón y toques de bordó.

La firma presentó Puma Social, una colección más urbana que deportiva, con prendas cómodas y con mucho diseño.
Al ritmo de My Sharona de The Knack, la línea para mujer consta de calzas estampadas o metalizadas, ciclistas, vestidos ajustados con calados en la espalda, camperas de colores contrastantes (violeta, turquesa, fucsia) o de tonos plenos con charreteras para un look más army y botas con apliques de piel de pelo largo o cadenas.
Para ellos, remeras con estampas pop art, camperas con prints ópticos, chalecos inflados, camperones con capucha con piel ribeteada, botas de cuero, buzos en combinaciones coloridas y botas de cuero con formato de zapato.

En una pasarela muy oscura, la diseñadora Jéssica Trosman cerró BAFWeek con una colección en la que combinó prendas de texturas rústicas y pesadas con otras más livianas y suaves.
Se destacaron los monos, vestidos de hombros descubiertos y abrigos de patchwork, las pecheras de cuero de pelo largo, las camperas estilo bomber de cuero texturado.
Presentó también chaquetas de líneas rígidas, tapados largos hasta el suelo con efecto avejentado, sacones de piel con dobleces para crear volumen. Se vieron también palazzos y vestidos de géneros etéreos, muchos de ellos con apliques de látex.